14 de agosto de 2015

El dentista que mató a Cecil


Es un cabrón. No solo pagó 50.000 € para hacerse con ese trofeo furtivo sino que, además, ha intentado hacer creer que “no sabía” que fuese un símbolo de Zimbawe. O sea que, encima, debemos creernos que es un pobre inocente víctima de todo este escándalo mediático. No cuela, sr. Parker, y prueba de ello es el acoso que ha sufrido en la Internet y en la televisión. Las redes sociales han explotado con comentarios, su clínica ha tenido que cerrar ante la presión que ha recibido desde que se conoció su identidad. Bien merecido lo tiene por representar a uno de los lados más oscuros de nuestra especie.

¿No se supone que debemos tener una responsabilidad con el resto de especies en este planeta? Simplemente, no puedo entender por qué algunas personas vapulean la vida que nos rodea de diversas formas sin tener el más mínimo miramiento al respecto. Qué lleva a un hombre a matar a un león para tenerlo de trofeo, ¿se siente más hombre haciéndolo? Menuda “hazaña”, considerando que somos la especie “inteligente” de la Tierra y que tenemos tecnología que supera las capacidades de cualquier animal. Para que sea una hazaña herculeana de verdad, debería de haberse enfrentado al león desnudo y con las manos, en cuyo caso Cecil se lo habría merendado sin sudar.

Pero claro, algunos energúmenos piensan que por llevar dos pistolas o un arco para abatir a un pobre animal desde la distancia demuestran su habilidad y aseguran su posición como “machos alfa” en la raza humana. Sí, Sr. Parker, menuda hazaña es la que Ud. ha llevado a cabo. Ojalá sufra durante años las consecuencias de su estúpida acción y si tiene hijos éstos lleguen a aborrecer las decisiones que llevaron a su padre a jodernos a todos matando a un animal que solo hacía su vida tranquilamente en una reserva natural.

Entre otros motivos, por esta razón vivo tan desconectado de las noticias y de la prensa. Solo hay mierda por un tubo, anormales que torturan a personas o animales por pasar un buen rato. ¿Por qué no hacen el pino al borde de un acantilado? Sería un subidón muy grande y de paso de matarían casi todos. Pero claro, matar a un león es mucho mejor, ¿verdad? Así todos te podemos repudiar por quitarle la vida a un animal tan hermoso y majestuoso que ahora sufre por culpa de las personas que invaden su hábitat natural. Y para colmo hay furtivos como tú, cabrón, que los cazan sin motivo alguno.

César P.

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