Hace años que no veíamos
a grandes dinosaurios corriendo por la pantalla del cine, por lo menos no como
lo hace la franquicia de Jurassic Park. Después de las 3 películas que
hicieron, con varios años de diferencia entre la segunda y la tercera, la
historia quedó un poco en el aire pero como ya nos han dejado claro siempre se
puede continuar de alguna forma. Esta vez, la han liado con un dinosaurio nuevo
y van a pasar todo tipo de cosas idas de olla cuando los dinos se escapan.
Tienen la costumbre de
hacer jaulas que no pueden encerrar a bichos tan grandes. Al parecer, no han
conseguido después de tantas películas asegurar bien el parque de atracciones.
Después de todos los desastres ocurridos, no sé cómo la gente sigue confiando
en la seguridad de las instalaciones. En la vida real, por mucho menos dejarían
de ir todos a una isla perdida para ver a bichos que potencialmente se los van
a comer vivos mientras patalean y gritan.
Los dinosaurios siempre
tienen ganas de comerse a alguien, bueno, los carnívoros no tienen nada mejor
que hacer. Los herbívoros van más a su rollo, son como enormes elefantes que pastan
por las praderas en paz. Un poco rollo, ¿no? La acción siempre está con los
velocirraptores y el T-rex, al cual han desbancado como el dinosaurio más letal
tras algunos experimentos genéticos. Pobre viejo T-rex, ya no lo llaman tanto
como antes, ¿será por esos bracitos pequeños que no sirven más que de adorno?
Tengo ganas de ver esta
nueva entrega de “Jurassic Park” que ha sido renombrada para reiniciar la
franquicia con otro enfoque. Al parecer, en Hollywood no les gusta numerar las
películas más allá del tres. No espero que la trama sea ninguna pasada, solo
voy por pasar el rato viendo como unos bichos se comen a algunos desprevenidos,
otros huyen, otros se pelean, etc. Lo típico de una de estas películas.
Ah, y como siempre, habrá
algún experto en dinosaurios que sabe justo lo que hay que hacer para
solucionar el problema. Al final, las cosas volverán a su lugar pero no sin una
buena dosis de destrucción por todo el parque de atracciones. Lo que no
entiendo es cómo los dinosaurios no se han esparcido por todo el planeta, ya
que las especies siempre consiguen emigrar. Controlar la naturaleza a una
escala siquiera cercana a lo que sugiere la peli es, mucho me temo, ciencia
ficción.
César P.
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