Estos días han
pasado factura a todos los peatones que osaban salir a la calle en la
capital, ya que ha sido literalmente como recibir un cubo de agua
tras otro. Un rollo. Por suerte, algunos tenemos ropa impermeable
pero otros no. Sabes que llueve mucho cuando la gente derrapa hasta
allí a donde va en vez de correr o caminar. Cuando cae lo que ha
caído estos días, las cosas son muy distintas ya que no puedes
tomártelo con calma cuando estas yendo a cualquier lugar.
Simplemente, hay prisa pase lo que pase.
Eso de ir dando un
paseo cambia a ir, más bien, a paso ligero tirando a rápido. O muy
rápido. Aceptémoslo, mojarse no es para tanto pero mojarse tanto es
un absoluto rollo. Para más inri, todo parece ir a otro ritmo cuando
llueve sin tregua sobre la capital. Los coches patinan así que mejor
no jugársela mucho pero no olvidemos a aquellos colgados que tienen
que pisar el acelerador a fondo sin importar el tiempo que haga
dejando tras de sí una estela de agua a su paso en días de lluvia
cuando las calles están llenas de charcos.
Si no queremos
darnos una ducha a cuerpo completo, mejor andarse con ojo cuando
caminamos por la acera. Mojarse más de la cuenta no mola. El civismo
brilla por su ausencia cualquier día pero cuando llueve mola menos
de lo normal, ya que te mojas más de la cuenta. Pues bien, no es que
llevar agua encima del cuerpo sea para tanto salvo por el simple
hecho de que aumenta la probabilidad de pillar un buen catarro. Por
no mencionar la humedad en el aire, que lo empeora todo.
No es de extrañar,
por lo tanto, que haya mucha gente que coge de todo en estas fechas.
Las molestias de garganta proliferan y las alergias, además, ya se
dejan ver por doquier. No olvidemos la fecha en la que estamos, la
primavera está empezando y ya se ven, bueno, se veían sus primeros
brotes hace unos días. Ahora mismo, como que no se ve nada porque
está todo nublado. Solo se ve un manto de nubes sobre la ciudad que
no se molesta en moverse para nada.
Pensábamos que
nos habíamos librado del frío y sí, puede que haga un poco menos
de frío, pero la lluvia ha venido para quedarse unos días
haciéndonos la vida un poco más pesada de lo normal. El tráfico de
atasca más de la cuenta, todo está mojado...vamos, que ni ganas de
salir a tomar unas cañas o algo. Esperemos a que escampe.
César P.
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