Después de meses de presión por parte del PSOE y tras la
amenaza de presentar una moción de censura contra Rajoy, éste, por fin, ha
llevado a cabo la comparecencia que se le exigía sobre el dichoso caso Bárcenas. Esta presentación se ha
realizado a primera hora de hoy y la hemos podido ver de forma escueta en las
noticias a lo largo del día, siendo el tema de conversación en todo el país.
Pues bien, el revuelo que se ha levantado por el caso del ex
tesorero del PP que supuestamente llevaba una contabilidad B del partido ha
sido tal que Rajoy se ha visto obligado ante
las circunstancias a dar explicaciones. A pesar de intentar quitar importancia
al asunto a lo largo de meses y esquivar el tema, la presión a la que se ha
visto sometido el presidente a este respecto ha sido abrumadora.
Responsables de ello con los miembros del partido
socialista, liderados por Rubalcaba, embarcados – al parecer – en una cruzada
por sacar todos los trapos sucios del PP y dar de sí el tema todo lo posible.
Digo esto porque no veo por ningún lado la necesidad de que el mismo presidente
y líder del PP haya tenido que dar explicaciones sobre un asunto el cual no le
compete hablar.
Para determinar la culpabilidad de Bárcenas (a toda luz
culpable a estas alturas) y la autoría de los delitos de los cuales se le acusa
ya están las autoridades pertinentes. Los jueces, abogados, fiscales, etc que
se encargan de llevar el caso terminarán por esclarecer todos los hechos y condenarán
a este señor al tiempo que merece pasar entre rejas sin ver la luz del sol más
que tras los barrotes.
La relación de Rajoy con Bárcenas es la similar a la que
éste último tuvo con otros miembros de su partido. ¿Es preocupante que Rajoy
haya apoyado al ex tesorero cuando se le acusó de robar? No lo creo. Como
cualquier buen compañero de militancia, no estaba fuera de lugar mostrar apoyo
tras los cargos presentados.
Lo que creo que es relevante, y es el quid de la cuestión
aquí, es que el PSOE está, claramente, aprovechando el tema para desgastar la
imagen de Rajoy todo lo que puede – y más. Esta estrategia la vemos en la
oposición cada vez que sale un trapo sucio a relucir.
Recordemos que ambos
partidos, PP y PSOE, son los que más casos de corrupción tienen abiertos en España.
Luego, ninguno puede señalar al otro a este respecto, estando los dos igual de
manchados.
Me parece recordar que hay temas más urgentes e importantes
que tratar que la sombra de Bárcenas en el PP, como el paro, la subida de los
precios, etc, etc, etc. A ver si algunos políticos empiezan a ganarse su
sueldo.
César P.
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