Definitivamente vivimos en la
sociedad de la información, rodeados de tecnología, páginas web, e-mails y un montón
de artilugios que, en apenas unos años, han pasado de las películas de ciencia-ficción
a convertirse en una parte imprescindible de nuestras vidas.
A día de hoy, si no tienes un móvil
de última generación, o no has visto lo último en la web o no tienes el último
modelo de portátil, estas desfasado, antiguo, caduco… Tan importante es tener
las ultimas herramientas como saber utilizarlas.
En los últimos diez años,
nuestros avances han sido asombrosos y posiblemente sean ridículos en comparación
a los diez próximos años. De la mano de todas las cosas buenas, ciertamente
vienen algunos peligros; la informática, sin duda tan positiva para el
desarrollo de la sociedad actual tanto en su parte económico-financiera como en
aspectos más humanos, no está exenta de riesgos.
Son muchas las formas de actuación
de los hackers en la red y muy amplios los daños que pueden causar pero sin
duda alguna los más conocidos y dañinos son los ataques a las webs. Los tipos
de intrusiones web son también variados y entre los más conocidos se
encuentran:
·
El acceso a los servicios no autorizados que el
sitio web ofrece, es decir, cando pretenden validarse como un usuario
registrado en un servidor web suplantando la identidad, y así pueden tener
acceso a la información restringida: datos, servicios financieros, etc.
·
El acceso al servidor directamente, es decir, el
que hospeda la página web. Accediendo así a sus directorios y ficheros, base de
datos, así como reconocer todo el entorno cercano de máquinas en la red mediante
las relaciones de confianza. Aquí el daño que se puede cometer en el servidor
puede ser magnitudes considerables, a que se podrán modificar los ficheros,
pueden sustituir la página principal del sitio por un mensaje del intruso e
incluso la implementación de herramientas de prospección.
·
Por ultimo debemos mencionar la denegación de
servicios (DoS) sobre el sitio en línea. La página web que esta caída o dejar
de prestar sus servicios. Este método no es tan directo como los métodos anteriores
pero puede hacer bastante daño a la imagen de la empresa frente a los usuarios.
Toda precaución es poca cuando se
trata de prevenir estos ataques y en muchos casos es prácticamente imposible
evitarlos. En primer lugar nuestro consejo es que tengas a mano siempre un buen
antivirus que proteja contra los malware y ficheros espías. El mantenimiento
del equipo también es otra forma de prevenir los ataques al ordenador. La
seguridad de la red es más complicada de obtener pero seguramente con los
servicios de un web master profesional los riesgos se pueden minimizar
bastante.
Lady Blu
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