La polémica de la Reforma Laboral.

Hoy quiero hablar de otro tema muy de moda: la Reforma Laboral.

El otro día tuve la oportunidad de coincidir con unos sindicalistas y estuvimos intercambiando opiniones acerca de la situación actual del mercado laboral, de como influiría la reforma, de la importancia de manifestarse en contra de la vulneración de los derechos de la clase obrera, de lo ladrones que son los políticos sea cual sea su signo, de que no hay Democracia, y un largo etcétera de tópicos con los que se lleva años manipulando a un pueblo cada vez más desinformado.

De lo que hablé con ellos, saqué las siguientes conclusiones acerca de lo que pensaban:

- El actual gobierno, nos ha tocado por sorteo en contra de la voluntad del pueblo español. Teníamos un anterior gobierno, elegido democráticamente, pero alguna extraña fuerza alienígena, nos ha impuesto en el poder a un partido al que nadie quería y cuya única misión es empeorar la situación y fastidiar a la población. Para eso usará todos los medios  a su alcance: privatización de los servicios públicos, represión de la clase obrera, aumento de los impuestos, RECORTES, en fin, todo un plan perfectamente pensado para provocar el hundimiento del país y el malestar de los ciudadanos.

- Existen unos señores, que tuvieron la suerte de nacer empresarios, y cuya única misión en la sociedad es machacar a los que tuvieron la mala suerte de nacer obreros. Los empresarios disfrutan especialmente despidiendo trabajadores, además de que cuantos más despiden, más dinero ganan.

- La reforma laboral tiene como objetivo único despedir trabajadores para generar más paro y que así los empresarios puedan ganar más dinero.

Es una lástima que no se den cuenta de lo absurdo de sus argumentos. Está claro, que el gobierno actual, ha sido votado por la mayoría de los electores, lo que no quiere decir, que ese resultado tenga que contentar a todos, pero la Democracia es así, se basa en RESPETAR lo que haya decidido la mayoría, aunque no nos guste.

Por supuesto, la máxima prioridad del partido del gobierno, no es fastidiar a los españoles, sino arreglar la situación crítica de nuestra economía. Esa es la base de la política, tomar las medidas necesarias aunque no sean del gusto del pueblo. Vuelvo a usar el símil de la familia: unos padres no son mejores si les compran más juguetes a sus hijos, o si les dan Coca-cola en lugar de agua,  o si les llevan a un colegio donde les exigen menos para que no se traumaticen. Está claro, que si un niño necesita una vacuna, se le pone, aunque le duela el pinchazo y llore, porque a la larga va a ser bueno para él. Sería un concepto equivocado de lo que es ser buenos padres, igual que es erróneo, pensar que es mejor político el que gobierna para contentar y salir reelegido, que el que gobierna en pro del bien común, aunque eso implique tomar medidas impopulares.

A nadie le gustan los pinchazos, ni tomar jarabes con sabor amargo, pero somos conscientes de que cuando estamos enfermos, es lo que toca.

Está claro que la reforma laboral tiene aspectos que no van a gustar, pero también está claro que no están, como algunos medios y los sindicatos se han empeñado en hacer ver, ideados para machacar al obrero y generar más paro. Solamente se habla de abaratamiento del despido, pero no de los incentivos a la contratación, a la formación de los empleados y de otros aspectos que a la larga van a favorecer la mejora del actual panorama laboral.

Respecto a la visión del empresario como un ogro que disfruta despidiendo trabajadores a los que solamente mantiene contratados porque la ley le obliga a tenerlos, podría escribir párrafos y párrafos, así que tratando de resumir, diré que la decisión de despedir a alguien, no es fácil, ni se toma a la ligera, y por supuesto un empresario no gana nada despidiendo, al contrario, pierde un trabajador con experiencia, lo cual puede ser mucho más valioso que la indemnización que le tenga que pagar. La reforma no está pensada para que los empresarios puedan, por fin, despedir libremente como tanto desean, sino para que puedan contratar con la seguridad de que llegado el caso de que la empresa necesite adaptarse a nuevas dificultades, sus trabajadores no van a suponer un lastre que hay que soltar, sino un activo más con el que contar, porque estarán mejor preparados y serán más polivalentes. Nadie debería empezar en un trabajo pensando en lo que le van a pagar si le despiden, sino en lo que puede aportar a la empresa de la que forma parte, pero eso ya es motivación de equipos de trabajo, un tema que trataré otro día.

Por último, empresario u obrero, no se nace, se hace, y todos sabemos que ser empresario en España es muy difícil, si no tuviera alguna ventaja, nadie lo haría, y tiraría por el camino fácil, el de ser obrero, que como sabemos tiene sus desventajas.

Espero dentro de un año poder estar escribiendo acerca del descenso del paro y del éxito de las políticas de creación de empleo.

Rubén.